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Definición de rebases dentales
El rebase dental es un procedimiento realizado en prótesis dentales removibles, como dentaduras o placas dentales parciales, con el objetivo de mejorar su ajuste y comodidad. Con el tiempo, debido al desgaste natural, los cambios en los tejidos orales o la pérdida de dientes, las prótesis pueden volverse inestables y causar molestias al paciente. El rebase consiste en la renovación de la base de la prótesis, la parte que está en contacto directo con los tejidos orales, utilizando una nueva capa de material acrílico o silicona. Este procedimiento se lleva a cabo para adaptar la prótesis a los cambios en la cavidad bucal, restaurar su ajuste adecuado y mejorar su funcionalidad y comodidad, brindando al paciente una prótesis que se ajusta de manera más precisa y que se adapta mejor a la estructura bucal actual.
Indicaciones para un rebase
Las indicaciones para un rebase en prótesis dentales removibles incluyen diversas situaciones en las cuales la prótesis ya no se ajusta adecuadamente o presenta problemas de estabilidad. Algunas de las principales indicaciones para un rebase son:
- Desajuste de la prótesis: Si la prótesis dental ha sufrido un desajuste significativo con respecto a la estructura de la cavidad bucal debido a cambios en los tejidos orales, pérdida de dientes o desgaste, puede ser necesario realizar un rebase para mejorar su ajuste y funcionalidad.
- Pérdida de estabilidad: Cuando la prótesis dental se mueve o se tambalea al hablar o masticar, esto puede indicar una pérdida de estabilidad. Un rebase puede corregir este problema para que la prótesis se mantenga firmemente en su lugar.
- Desgaste y daño significativo: El desgaste y daño excesivo de la base de la prótesis pueden afectar su ajuste y comodidad. Un rebase puede renovar la superficie desgastada y mejorar la calidad de la prótesis.
- Cambios en la estructura oral: Con el tiempo, la estructura ósea y los tejidos orales pueden cambiar debido a factores como la pérdida de hueso alveolar o la reabsorción ósea. Estos cambios pueden hacer que la prótesis ya no se ajuste correctamente y requiera un rebase para adaptarse a la nueva forma de la cavidad bucal.
- Molestias e irritaciones en los tejidos orales: Si la prótesis causa molestias, irritación o úlceras en los tejidos orales, esto puede indicar la necesidad de un rebase para suavizar las áreas problemáticas y mejorar la comodidad del paciente.
Es importante que el paciente se comunique con su dentista o protesista dental si experimenta alguno de estos problemas, ya que un rebase puede ser una solución efectiva para restaurar la función y comodidad de la prótesis y mejorar la calidad de vida del paciente.
Proceso de rebase
El proceso de rebase es un procedimiento que se realiza en prótesis dentales removibles para mejorar su ajuste y comodidad. A continuación, se describe el proceso general de rebase:
- Evaluación y diagnóstico: En primer lugar, el dentista o protesista dental evaluará la prótesis dental actual y realizará un diagnóstico para determinar si es necesario un rebase. Se examinará la condición de la prótesis, la integridad de su base y su ajuste en la cavidad bucal.
- Toma de impresiones: Una vez que se ha decidido realizar un rebase, se procederá a tomar impresiones de la cavidad bucal del paciente. Estas impresiones se utilizarán para crear un molde preciso de la estructura bucal y guiar la renovación de la base de la prótesis.
- Preparación de la prótesis: La prótesis se limpiará y desinfectará para eliminar cualquier residuo o placa bacteriana. Si hay áreas desgastadas o dañadas, se pueden eliminar para preparar la prótesis para el rebase.
- Acondicionamiento de la prótesis: Antes de realizar el rebase, se puede aplicar un acondicionador químico en la superficie interna de la base de la prótesis para mejorar la adhesión del material de rebase.
- Renovación de la base: Se prepara una nueva capa de material acrílico o silicona y se coloca dentro de la base de la prótesis. La prótesis se colocará nuevamente en la cavidad bucal del paciente para que el material de rebase se adapte a la estructura oral.
- Ajuste y pulido: Una vez que el material de rebase ha fraguado y se ha adaptado adecuadamente a la cavidad bucal, se procede a realizar cualquier ajuste necesario para mejorar el ajuste y comodidad de la prótesis. Luego, la prótesis se pulirá para obtener una superficie suave y agradable al paciente.
- Entrega al paciente: Finalmente, se entrega la prótesis rebaseada al paciente, quien deberá probarla y asegurarse de que se ajuste adecuadamente y se sienta cómoda.
El proceso de rebase puede variar ligeramente según el tipo de prótesis dental y las necesidades del paciente. Es importante que el rebase sea realizado por un profesional capacitado y experimentado en prótesis dentales para garantizar un resultado exitoso y mejorar la función y calidad de vida del paciente.
Materiales utilizados en rebases
En el proceso de rebase dental, se utilizan diferentes materiales para renovar la base de la prótesis y mejorar su ajuste y comodidad. Los materiales más comunes utilizados en rebases son:
1. Resinas acrílicas autopolimerizables: Estas resinas son ampliamente utilizadas en el rebase de prótesis dentales. Se presentan en forma de polvo y líquido, y se mezclan para formar una pasta que se coloca dentro de la base de la prótesis. La resina acrílica autopolimerizable se endurece por sí sola con el tiempo.
2. Resinas acrílicas termopolimerizables: Estas resinas también se presentan en forma de polvo y líquido, pero requieren calor para su endurecimiento. Se utilizan en rebase de laboratorio, donde se puede aplicar un proceso de curado controlado en un horno dental.
3. Siliconas: Las siliconas son materiales elastoméricos utilizados en rebases de prótesis parciales o retenedores removibles. Se presentan en forma de pastas de dos componentes que se mezclan y se colocan en la base de la prótesis para adaptarse a la estructura bucal.
4. Hidrocoloides irreversibles: Estos materiales también se utilizan en el proceso de toma de impresiones para crear un molde preciso de la cavidad bucal antes de realizar el rebase. Se presentan en forma de pasta que se solidifica y toma la forma de los tejidos orales.
5. Acondicionadores químicos: Estos son productos químicos utilizados para preparar la base de la prótesis antes de realizar el rebase. Ayudan a mejorar la adhesión del nuevo material de rebase a la prótesis existente.
Cabe destacar que la elección del material de rebase dependerá del tipo de prótesis dental, la preferencia del dentista o protesista dental y las necesidades específicas del paciente. Es fundamental que el profesional esté capacitado en el uso de estos materiales y siga las técnicas adecuadas para garantizar un rebase exitoso y una prótesis bien ajustada y funcional.
Cuidado y mantenimiento de prótesis rebasadas
El cuidado y mantenimiento adecuado de una prótesis rebasada son fundamentales para prolongar su durabilidad, mantener la salud bucal y garantizar la comodidad del paciente. A continuación, se presentan algunas pautas importantes para cuidar una prótesis rebasada:
1. Limpieza diaria: Es esencial limpiar la prótesis rebasada todos los días. Se debe cepillar la prótesis con un cepillo de dientes suave y un limpiador de prótesis dental específico o una pasta dental no abrasiva. Evitar el uso de pastas dentales convencionales, ya que pueden ser demasiado abrasivas para el material de la prótesis.
2. Remojo diario: Además de cepillar, es recomendable remojar la prótesis en una solución limpiadora o en agua tibia con una tableta limpiadora para prótesis dentales, especialmente durante la noche. Esto ayudará a eliminar bacterias y residuos que puedan acumularse en la prótesis.
3. Manipulación cuidadosa: Al manipular la prótesis, es importante hacerlo con cuidado para evitar daños o fracturas. Sostenerla sobre una toalla o llenar el lavabo con agua para reducir el impacto en caso de caída accidental.
4. Evitar alimentos duros o pegajosos: Se debe evitar comer alimentos duros o pegajosos, ya que pueden dañar o desalojar la prótesis rebasada. Cortar los alimentos en trozos pequeños y evitar masticar con los dientes frontales.
5. Revisiones regulares: Realizar revisiones periódicas con el dentista o protesista dental es fundamental para asegurarse de que la prótesis rebasada se ajuste correctamente y funcione de manera óptima. Cualquier problema o incomodidad debe ser reportado y atendido de inmediato.
6. Mantener una buena higiene bucal: Mantener una higiene bucal adecuada es esencial para proteger tanto los dientes naturales como la prótesis. Cepillar los dientes naturales, usar hilo dental y enjuague bucal diariamente ayudará a mantener una salud bucal óptima.
7. No dormir con la prótesis puesta: Es importante no dormir con la prótesis rebasada para permitir que los tejidos orales descansen y se recuperen durante la noche.
Siguiendo estas pautas de cuidado y mantenimiento, los pacientes pueden asegurarse de que su prótesis rebasada funcione correctamente, sea cómoda y dure el mayor tiempo posible. Siempre es recomendable seguir las instrucciones proporcionadas por el dentista o protesista dental y comunicar cualquier problema o inquietud que surja para recibir el cuidado adecuado y mantener una sonrisa saludable y funcional.
Problemas comunes con rebases
Aunque los rebases son procedimientos importantes para mejorar la adaptación y funcionalidad de las prótesis dentales removibles, pueden surgir algunos problemas comunes que los pacientes deben tener en cuenta. Algunos de los problemas más frecuentes con rebases incluyen:
1. Mala adaptación: Un rebase mal realizado puede resultar en una mala adaptación de la prótesis a la cavidad bucal del paciente. Esto puede causar puntos de presión dolorosos en los tejidos orales y dificultar la masticación y el habla.
2. Desgaste prematuro: Si el material utilizado en el rebase no es lo suficientemente resistente, la prótesis puede sufrir un desgaste prematuro. Esto puede hacer que la prótesis se vuelva inestable y menos duradera.
3. Fugas o filtraciones: Un rebase mal ajustado puede permitir la entrada de partículas de alimentos o líquidos debajo de la prótesis, lo que puede causar irritación y malos olores.
4. Pérdida de estabilidad: Un rebase que no se ajusta adecuadamente puede resultar en una pérdida de estabilidad de la prótesis. Esto puede hacer que la prótesis se mueva o se tambalee al hablar o comer.
5. Irritación de los tejidos orales: Si la prótesis rebasada tiene bordes irregulares o puntos de presión, puede causar irritación, llagas o úlceras en los tejidos orales del paciente.
6. Alergias a los materiales: Algunos pacientes pueden experimentar reacciones alérgicas a los materiales utilizados en el rebase, lo que puede provocar inflamación o enrojecimiento en la boca.
Para evitar estos problemas, es crucial acudir a un dentista o protesista dental experimentado y capacitado en el proceso de rebase. El profesional debe realizar una evaluación adecuada de la prótesis y la cavidad bucal del paciente, y llevar a cabo el rebase con precisión y atención a los detalles. Si el paciente experimenta algún problema después del rebase, debe informarlo de inmediato al dentista o protesista para que se realicen los ajustes necesarios y se aborden las preocupaciones del paciente de manera oportuna. El seguimiento y la comunicación son clave para garantizar que el rebase sea exitoso y que el paciente pueda disfrutar de una prótesis bien ajustada y cómoda.
Rebase blando para prótesis dentales
El rebase blando es un material de silicona o similar utilizado en la odontología para reajustar y mejorar el ajuste de las dentaduras removibles. Se coloca entre la base de la prótesis y las encías del paciente para mejorar la adaptación y la comodidad. Es útil cuando la prótesis ha comenzado a perder su ajuste debido a cambios en la mandíbula o encías. El rebase blando es temporario y no permanente, permitiendo al dentista realizar ajustes precisos y mejorar la retención. Es una solución conveniente para aliviar las molestias y prevenir problemas causados por una prótesis mal ajustada. Un profesional dental debe realizar el procedimiento y evaluar la necesidad de un rebase blando.
¿Cómo se hace un rebase en una prótesis dental?
El proceso de realizar un rebase en una prótesis dental implica los siguientes pasos:
1. **Evaluación:** Un dentista evalúa la prótesis y la boca del paciente para determinar si es necesario un rebase debido a cambios en las encías o huesos.
2. **Toma de impresiones:** Se toman impresiones de la boca con la prótesis existente en su lugar para obtener una réplica precisa de la anatomía oral.
3. **Preparación:** La prótesis existente se limpia y se retira cualquier residuo. Se crea un espacio en la base de la prótesis para el material de rebase.
4. **Aplicación del material:** El material de rebase, que suele ser una silicona o similar, se coloca en la prótesis y se coloca en la boca del paciente. El paciente muerde para que el material se asiente correctamente.
5. **Ajustes:** Una vez que el material de rebase se ha endurecido, se retira la prótesis y se hacen ajustes finos para garantizar un ajuste cómodo.
6. **Acabado:** La prótesis se pule y se verifica su ajuste antes de entregarla al paciente.
El rebase ayuda a mejorar la comodidad y la adaptación de la prótesis a los cambios en la boca del paciente. Un dentista experimentado es esencial para realizar este procedimiento correctamente.
Rebase dental directo
El rebase dental directo es un procedimiento que mejora el ajuste de una prótesis removible. En este proceso, se agrega nuevo material de rebase, generalmente una resina acrílica, directamente sobre la base de la prótesis existente. El dentista comienza limpiando la prótesis y, si es necesario, ajustando la base. Luego, aplica el material de rebase en la boca del paciente y permite que se endurezca mientras el paciente muerde para lograr un ajuste adecuado. Los ajustes finos pueden hacerse para garantizar la comodidad y el ajuste preciso. Finalmente, se retiran los excesos de material y se pule la prótesis. El rebase dental directo mejora la retención y comodidad de la prótesis, mejorando la calidad de vida del paciente.